miércoles, 11 de diciembre de 2019

HAZ LO QUE YO DIGA PERO NO LO QUE YO HAGA



¿Hasta cuándo nos dura la resaca de las elecciones? Es increíble la capacidad que tiene el ser humano para indicar lo que NO deben hacer los demás. Para eso, nos sobramos y nos bastamos.

Después de ver, escuchar y, sobretodo, leer, he entendido que la democracia no es el mejor sistema político para nosotros. Probablemente el más justo. Aunque este tema lo dejaremos para otro día.

Nuestro país es experto en etiquetar:
- Si votas a Vox eres un fascista, racista, etc.
- Si votas a Unidas Podemos, eres un comunista, rojo, etc.
- Si votas a…

¿No vivimos en una democracia? ¿No tenemos el derecho (que no el deber, ojo) a votar a quien nos plazca? ¿No hay una ley electoral que exige unos requisitos para que un partido sea legal? Hablemos de esos requisitos…

Me parece mucho más grave que existan partidos políticos con miembros en sus filas que han sido condenados por terrorismo o corrupción. ¡Coño, que nos han estado robando! Ladrón de guante blanco lo llamaban. Y ahora nos preocupamos por el inmigrante que nos va a quitar el trabajo. ¿Qué trabajo? ¿De verdad?

Detesto en el absurdo que se ha convertido hoy hablar de política. Un teatro cínico de intereses desproporcionados donde las personas actúan de manos extensoras de barata propaganda electoral, reenviando noticias o fake news sin importarles la fuente o su veracidad, da igual, porque solo interesa lo que el otro ha hecho mal o lo mal que lo pasaremos.

A toda esa gente, un mensaje muy simple: “Construir siempre es mejor que destruir”.


jueves, 25 de julio de 2019

VERGÜENZA


Es lamentable deplorable, indigno, bochornoso, ruin... cualquier calificativo vale.

Hablemos claro: llevan meses, incluso años, identificando una situación social y económica como terrible. Ahora tienen oportunidad de 'cambiar', pero se cierran en banda y no son capaces de llegar a ningún acuerdo, ni siquiera con aquellos que debieran ser sus 'socios' por ideología.

¿Y esperan que me crea que su prioridad es el país y sus habitantes? ¡Venga ya!

Y sigo hablando claro: si estuvieran sin cobrar mientras no formen gobierno...

Si tuvieran que costear de sus bolsillos los más de cincuenta millones de euros que cuestan unas nuevas elecciones que seguirán diciendo lo mismo...

Si, por no realizar su trabajo correctamente, fueran despedidos como en cualquier trabajo...

Si no pudieran presentarse a las siguientes elecciones por ineptos y tuvieran que ser relevados...

Si de verdad tuvieran en mente a aquellas personas que deben esperar un cambio de políticas, desde lo social a lo económico, para tener un desahogo real en el día a día...

Pues creo que con solo una de estas razones, hoy ya tendríamos gobierno. El país lo mantienen sus habitantes. Estos políticos solo resaltan el chiringuito de sinvergüenzas que mantenemos. Y todo esto quedará en un circo ya que 'aún' pueden evitar elecciones.

jueves, 20 de junio de 2019

ASESINOS POR UN CIGARRILLO

"¿Me das un cigarrillo? - No." Fin de la vida.

Y treinta y tres años a la mierda. Una familia destrozada. Un futuro reventado. Un grupo de amigos desolados (que leo que perdieron otro recientemente por un atropello). Y una vida menos.

Esto ha ocurrido en Oviedo la pasada semana, al término de unas fiestas de un barrio. No deja de ser triste, pero lo veo muy preocupante. Porque al margen de si fue exactamente así o no, que habrá alguna variación porque hay una parte que nunca podrá defenderse ni explicar lo sucedido, estamos hablando de que tres monstruos que apenas son mayores de edad le propinaron una severa paliza que terminó en la muerte de una persona días después en el hospital.

Todos los chavales de hoy en día no son así, ni mucho menos. Sin embargo, hay un porcentaje preocupante de individuos que acosan y hostigan a gente porque sí. Joder, que falta más empatía y más conversación y sobra esa soberbia y despotismo gratuito. Soy consciente de que es difícil educar en la actualidad pero creo que estamos fallando en las formas. Además, nos hemos dejado el mínimo de moral e intelecto por el camino. También el respeto a la vida y la educación para/con otras seres.

¿Debemos tener miedo? No, ni mucho menos. Pero quien no debe tener miedo es el/la juez/a que lleve el caso. Ni que le tiemble la mano al delimitar el castigo que merecen. Ni quiero pensar en las rebajas de pena o en la reinserción en la sociedad de estos sujetos, sería muy injusto. Porque hay una persona menos y tres monstruos más. Hay algo que estamos haciendo mal.

viernes, 31 de mayo de 2019

UN FUTURO MAL APOSTADO

Leyendo otro caso más de corrupción en el deporte, el de la operación 'Oikos', donde presuntamente hay varios partidos amañados y algunos futbolistas e, incluso, un presidente imputados, no me sale otra reacción que el cabreo y el cansancio. Pero con el trasfondo del asunto, me explico:

Mi cabreo viene porque se ha permitido una tendencia peligrosa, sobretodo para jóvenes, pero también para cabezas de familia, donde no hay límite ninguno, excepto el dinero propio (o ajeno).  Hace unos meses, un portero de uno de estos lugares me contaba como un hombre de mediana edad perdía en una noche todo el sueldo del mes (950 €) que acababa de cobrar ese mismo día. La enfermedad se llama ludopatía. Y esto, es muy triste. Que además, hayan personas que se lucren con este tipo de casos, mucho más triste aún. Pero que nuestros gobiernos lo permitan porque, entre otras cosas, cobran los impuestos y 'está todo en regla', indignante.

Y se puede jugar y apostar muy fácilmente: en el móvil, en el salón de juego, con apuestas deportivas, de carreras de galgos, con ruletas rusas, con máquinas tragaperras... Tenemos un pequeño 'Las Vegas' por cada calle que andamos.

Lo que me cansa es ver como nos pasamos la pelota de un lado a otro, de un ayuntamiento al gobierno de la Comunidad y de ahí al gobierno central, sin solucionar absolutamente nada. Las casas de apuestas han masificado pueblos y ciudades (solo en las Torres hay ocho). El tabaco, el alcohol y el juego han sido, históricamente, los vicios más lucrativos. Hemos sustituido cafeterías y bares por salones de juego. Y el juego en exceso, como todo en la vida, puede ser fatal.

Hay soluciones y deben ponerse límites antes de que sea tarde. Con el carnet por puntos y el aumento de controles se consiguió reducir el número de accidentes provocados por el consumo de alcohol, y se consiguió, sobretodo, concienciación. Logremos entre todos la fórmula que reduzca este vicio porque el 'juega con responsabilidad' es meramente una pantomima. 

jueves, 23 de mayo de 2019

REDES SOCIALES: LA NUEVA INQUISICIÓN


Desde los comienzos de internet, donde los chats y foros nos conectaban virtualmente, hemos asistido a una brusca y violenta transición del eterno juicio social sobre lo que dejamos o no dejamos de hacer.

La interacción actual entre personas y el alcance a la información (o a las informaciones que nos interesan), son asombrosas respecto a hace, pongámosle, unos veinte años. Pero claro, las herramientas que hoy en día tenemos en la mano pueden usarse de mil maneras. Y siempre gustó la crítica, la detracción, la difamación y las calumnias pero, sobretodo, opinar lo que está bien y lo que está mal.

Por ello, cualquier individuo que se salga de la línea de lo 'correcto' socialmente, nos lo cargamos: un simple tatuaje, una fotografía, una frase con algún equívoco, un corte de pelo, una copa en la mano, una camiseta, un vestido, un escote, un comentario, una publicación en Instagram, un tweet, un titular impreciso... Cualquier gesto o acción de nuestro día a día.

¿Y qué pasa? Que se nos olvidan los límites. Y el respeto, el decoro, el tacto. No pasamos el filtro del razonamiento (mucho menos el del intelecto) y soltamos lo primero que se nos pasa por la cabeza. Y conseguimos hacer daño, a veces mucho, a personas que, incluso, ni saben que están hablando de ellas. Pasa en Facebook, pasa en Twitter, pasa en Instagram...

Y conseguimos enfrentamientos absurdos y discusiones odiosas, móvil en mano, por algo viral pero insignificante. Lo bonito que sería dejar hacer, dejar vivir, respetarse y aprender en vez de ajusticiar a un famoso o a un desconocido en una red social.
La libertad de expresión es un derecho. El respeto, un deber. Hagámonos valedores de ambos.

martes, 21 de mayo de 2019

¿BATALLA LOCAL O ELECCIONES?


Estos últimos días observo como se nos va de las manos la campaña electoral de mi pueblo. Además del escueto (por no decir la falta de) respeto entre partidos políticos, he comprobado como la gente de la calle sigue defendiendo con uñas y dientes a 'su' partido, pase lo que pase.

En el arte de la guerra se decía que "la mejor defensa es una buen ataque". Y eso es lo que está ocurriendo. Veo 'habitantes' que cuestionan a los aspirantes por no estar empadronados, o por no estar trabajando en el municipio. Sigo la vista atrás y aparece alguna denuncia por saltarse normas de la Junta Electoral en plena campaña.

Que no digo que falte o no razón, ni siquiera que sea o no legal pero, ¿somos poco más de 21.000 habitantes y ésto es lo que nos interesa? ¿Qué envergadura acapara el interés de unos pocos? Me preocupa palpar más el anhelo de poder antes que el bien común.

Sé que es difícil, pero me gustaría ver de una puñetera vez que la política que practican los Sánchez, Rivera, Iglesias... no tiene nada que ver con la política local. Que si nos parece bien e interesante la propuesta del rival, se dice, se apoya y punto. Para batallas dialécticas y de oratoria ya tenemos 350 diputados, 266 senadores y un sinfín de políticos, periodistas y programas de televisión. Para gestionar un pueblo estoy seguro de que se hará mucho mejor si partimos de la unión de todos aquellos que han sido elegidos por sus vecinos, sean del color que sean.

miércoles, 3 de abril de 2019

POLÍTICAMENTE INCORRECTOS


En estas semanas 'previas' a las distintas campañas electorales, donde las noticias o el intento de ellas se retozan airadamente para intentar confundir y revolver el pensamiento y hasta la conciencia de los votantes, tengo que decir, una vez más, que la política, cada día, da más asco.

Ya sé que no digo nada nuevo. Pero parece que no había bastante con las mentiras, calumnias y falsas promesas a las que nos tenían acostumbrados. Ahora, cualquier simpatizante, bien por las redes sociales, bien en el bar, es capaz de creerse cualquier argumento que le pongan. Y lejos de comérselo con patatas; lo comparte, lo debate, lo discute, lo defiende y lucha por él si es necesario.

Porque en este país tener la razón tiene más valor que conocer la verdad. He llegado a presenciar discusiones por Venezuela e Irán como si la visitáramos todos los veranos; y enfrentamientos de seguidores de Vox vs Podemos como si estuviéramos en plena Guerra Civil, o, incluso, que me digan que "el feminismo 'solo' lleva unos años".

En serio, ¿por qué nos creemos lo primero que nos dicen? ¿qué miedo tenemos a escuchar algo que no esperamos? En ocasiones creo que nuestra capacidad para filtrar una noticia nos la ha impuesto el partido político al que seguimos, como si fueran papá o mamá, creyéndonos que todo lo que hacen estará bien hecho.

¡No! No caigamos en la misma trampa. Esto no se trata de ser seguidor de un equipo de fútbol para lo bueno y para lo malo. Pueden gustarnos propuestas de todos los colores políticos. Sí, de todos. Puede haber diversidad de ideas, de opiniones, de gustos. Al menos, seamos libres de pensamiento.

viernes, 8 de marzo de 2019

FEMINISMO O IGUALDAD, QUEDÉMONOS CON EL CONCEPTO


Nos hemos llevado un día dedicado a ellas por parte de todos desde hace muchas décadas al terreno áspero de la política. En mi opinión es un enorme error y tiene una explicación sencilla: el movimiento feminista es independiente de todo lo relacionado con la política. En el momento que se encasilla con un partido, termina perdiendo adeptos.

Este día tiene ciertos matices de los que me gustaría quedarme con dos: recordar que años atrás las mujeres eran oprimidas por el hombre y que queda un largo camino por la igualdad donde todos tenemos que actuar ya. Y es que existe igualdad legal, pero no termina de ser real, ese es el problema.

Cada día que pasa, suelo leer y escuchar más lo de "si no eres feminista, eres machista". Siempre he odiado que me encasillen, mucho más cuando ni siquiera me he pronunciado. Así que llamadme como mejor guste, pero mis ideas son claras y concisas:
- Odio la violencia de género en su totalidad. Odio aún más cuando el hombre le pone una mano encima una mujer por el mero hecho de ser hombre.
- Odio la violación. Y odio aún más que no se castigue a los violadores como si fueran asesinos, porque lo único que no quitan es la vida física.
- Odio la leyes de violencia de género actuales cuando no solucionan nada. Odio que las condenas de los asesinos y violadores sean de risa.
- Odio las diferencias salariales y de oportunidades laborales. En el trabajo (como en la vida) siempre veo personas, no hombres y mujeres.
- Los hombres y las mujeres NO somos iguales, igual que un niño no es lo mismo que un anciano, es una evidencia clara. Otra cosa son sus derechos y oportunidades, que deben ser exactamente los mismos.
- Nuestra lengua castellana tiene pinceladas machistas. Pero la lengua cambia con el paso de los años. y hay que trabajar en ello. Eso sí, para mí no es prioritario algo que no se puede cambiar de la noche a la mañana cuando tenemos que arreglar todo lo anterior de manera urgente.

Y mucho más. Resumo a grandes rasgos lo que pienso. ¿A favor del feminismo? Sí, por supuesto.
Nunca de la radicalización, nunca del enfrentamiento, nunca del aprovechamiento político-partidista.

jueves, 7 de marzo de 2019

¿Y SI LOS TAXIS SE ACTUALIZAN?


Y seguimos estancados con este transporte público. Conste por delante que defiendo a los taxistas y sus derechos, pero nunca defenderé el monopolio, la especulación de licencias y el acomodamiento laboral. Política aparte, ¿de verdad cuesta tanto quitar de una vez el taxímetro? Con todos los adelantos que hay, ¿cuesta tanto indicar al pasajero lo que le va a cobrar antes de subirse?

Llamadme loco, pero se está convirtiendo en una situación irracional e inviable. Para empezar, la cantidad de impuestos que deben pagar los taxistas por trabajar (homologaciones, carnets especiales, etc.), sumada a la ya mencionada especulación del precio de las licencias, hacen que el viaje en taxi tenga que costar lo que vale hoy. Y eso sí es un problema del gobierno que debe resolver a la voz de ya.

Uber y Cabify no pagan los mismos impuestos, pero no entiendo que algo que puede ser positivo para el usuario final, se esté enredando y limitando tanto (como han hecho en Cataluña). Será porque es más interesante el dinero que suelta en forma de impuestos el sector del Taxi.

La aplicación móvil que utilizan, con su sencillez y transparencia, consigue que no tengas que ir preocupado por cuánto te va a costar el trayecto. Tienes una valoración del chófer con puntuación y opiniones (como si fueran restaurantes, hoteles, etc.) y te guían a través del GPS por el mapa en directo para tu seguridad, ¿dónde está el dilema?

Pero claro, esto es España, y cuando viene un servicio más barato y mejor, 'nos crea el problema'. ¡No! El problema ya lo teníamos nosotros de antes por abusar de las personas autónomas y no darles margen de mejora. Y porque, al final, somos los usuarios quienes pagamos todos los platos rotos. La mejora de este servicio depende de los que gobiernan. Que no se posicionen de un lado u otro y mejoren drásticamente las condiciones, porque de tener las reglas del juego tan anticuadas y deterioradas, han creado un enfrentamiento innecesario.

miércoles, 6 de marzo de 2019

LO QUE MAL EMPIEZA, MAL ACABA


Hoy me toca un discurso ventajista por hacerlo a posteriori, pero 'Real' como él mismo. Lo que todos sabíamos, lo que todos sabemos. Es fácil enumerar los 'desastres' de esta temporada y ahora es más fácil aún hablar de todo y todos. Por eso no quiero centrarme en una única cuestión, sino en la acumulación de varias:

- Zidane decide marcharse. Fue el primero en ver que a esta plantilla no se le podría sacar mucha más punta. No ha sido el mejor entrenador que he visto, pero los títulos y el vestuario le avala.
- Y Cristiano, también. Su marcha no era un problema si no se le encontraba un recambio de calidad. Pero no fue así.
- Lopetegui, quiso pero no pudo. Su salida de la Selección ya fue traumática y no encontró continuidad en un equipo 'harto' de éxitos. La carta de despido, tan prepotente como déspota.
- Solari. Se notó el primer día que era un parche y como tal, no ha servido para dar una solución efectiva. Problema añadido el de Isco.
- Fichajes I. Mala planificación deportiva. No es obligatorio fichar, pero hay que reestructurar el equipo. La gente joven ayuda pero no es su principal responsabilidad. Ceballos, Valverde, Odriozola, Reguilón, Vallejo... serán buenos jugadores pero, a día de hoy, no son jugadores TOP.
- Fichajes II. Courtois y Lunin no eran una prioridad. Mariano por posición, pero no por jugador. Odriozola no estaba mal visto. Brahím Díaz, fichaje escaso con la que ya teníamos encima.
- Bajo rendimiento de los pesos pesados. Marcelo, Isco, Modric, Kroos, Varane, Bale... ninguno ha estado a su altura. Sin excusas.
- Vinícius. Será un grande, pero debería ser un extra y no el jugador por el que estaban pasando todas nuestras posibilidades.
- Actitud. De todos. Falta de ambición, de ganas, de agresividad, de sacrificio, de humildad. Innumerables aspectos tácticos y psíquicos que se me ocurren que han decaído de su nivel óptimo tras el inevitable paso del tiempo y el acomodamiento del vestuario.
- Florentino. Por supuesto. Quien manda y no controla ni toma decisiones a tiempo es muy responsable. Estadios aparte, el Madrid es grande por lo que gana, y hasta el próximo Trofeo Bernabéu no tenemos opción.

Genera aflicción ver como con la capacidad económica y universal que tiene este equipo, ayer nos dieran un correctivo que quedará palpable en las retinas de todos los madridistas. Sabíamos que ésta no era nuestra temporada, que nuestro mayor logro ha sido, para mí, ganar cuatro Champions League en la era Messi.

Es duro abandonar la batalla en Marzo. El fútbol son etapas y espero que volvamos pronto.

lunes, 4 de marzo de 2019

LAS REDES SOCIALES NO SON SOCIABLES


Hace unas semanas cierto amigo se 'desconectó' de Facebook, Instagram, grupos de Whatsapp, etc. ¿Motivo? Pasaba demasiadas horas pegado al móvil. Y me hizo pensar que no le falta razón. A veces se necesita una decisión radical para ajustar el equilibrio de nuestra vida. Malgastamos mucho tiempo con el móvil, internet y las redes sociales. Digo que malgastamos, porque las redes sociales son una herramienta tecnológica increíble y como tal, puede utilizarse bien o mal, depende cómo queramos invertir nuestro tiempo.

Soy defensor de todo lo que nos pueda conectar como personas, sobretodo cuando el mundo laboral y personal nos tiene alejados de aquella gente que conocemos pero, sin caer en la incongruencia, estar al tanto de lo que les pase a nuestros amigos no nos hace mejor amigos. Critico (y autocritico) que dejamos de lado todo lo que nos permite sociabilizarnos, perdemos el tiempo viendo 'qué ha hecho este fin de semana aquel amigo que hace meses que no veo' cuando directamente, y con la misma plataforma, podemos quedar con él para tomar un café, una cerveza, un almuerzo o visitarlo. Pocas cosas más bonitas pueden pasar en este mundo que disfrutar de este tipo de ratos mientras podamos.

El tren de las nuevas tecnologías pasa y no es obligatorio montarse en él, que quede claro. Pero si nuestra decisión es la de estar a la onda, aunque sea un poquito, hoy en día es inevitable estar 'conectado'. Nos ha facilitado seguir estando en contacto con esos compañeros de estudios que no vemos en años. Pero también nos ha hecho más holgazanes con los que tenemos a mano. En el equilibrio se encuentra el éxito. Con el buen manejo obtendremos recompensa. Dediquemos el tiempo a lo verdaderamente importante, nuestra familia, nuestros amigos, las personas. Y si en vez de hacerlo a través de una pantalla, lo hacemos directamente, mucho mejor.


jueves, 21 de febrero de 2019

A LA SEGUNDA VA LA VENCIDA

En varias ocasiones he querido retomar este blog. Esta vez, me lo tomaré en serio. Tantos temas de los que poder hablar, un día a día bastante ocupado pero con menos estrés que en los últimos años y, como no, las ganas de estar constantemente haciendo algo, espero que me permitan un poco de continuidad.

Hace ya casi seis años desde la última vez. Ocho, si cuento desde que dejé de escribir con continuidad. En alguna ocasión he utilizado alguna red social pero, ¿por qué no la libreta?

Pues, aunque parezca mentira, se necesita un poco más de tiempo. Espero que el café de a diario me lo permita.

¡Un saludo a tod@s!