miércoles, 13 de noviembre de 2024

TRISTE REALIDAD

Llevo mucho tiempo sin escribir por aquí pero la rabia e indignación que siento ahora mismo no quiero dejarlas en saco roto. Aunque siento más pena que otra cosa. Esta mañana vi la noticia donde encontraban a los niños de tres y cinco años desaparecidos desde el pasado 29 de Octubre cuando les sorprendió la riada en Torrent. Y no quiero imaginar el dolor de por vida que tendrán esos padres. No sé si aún más el padre, que estuvo con ellos y vio como solo él pudo salvarse. Perder así o de cualquier forma a tus hijos es seguramente lo más duro e inhumano que nos puede pasar en nuestra existencia.

Tenemos claro que el planeta Tierra donde habitamos no para de azotarnos y sorprendernos. Y vivir en un país del primer mundo no nos excluye de sufrir pérdidas humanas ya sea por catástrofes naturales, pandemias, guerras, etc. Por el momento, me centraré en los fenómenos atmosféricos. Nadie, repito, nadie puede controlar ni ser responsable de una DANA, un terremoto o un tsunami. Pero sí hay responsabilidad en la forma de actuar e, incluso, con los medios que contamos, de evitar tragedias mayores y víctimas mortales.

Y una vez que llovió, y teniendo medios e información fehaciente de lo que podría pasar, ahí es cuando aparece lo que ahora muchos denominan el 'estado fallido'. Yo solo veo políticos ruínes, embusteros e ineptos, capaces de lo peor por mantenerse en el poder. Alzando la miseria de la política y anteponiéndola al sentido común y solidario que gran parte la gente les ha demostrado. Cuando pasaron las primeras horas, ya los vecinos buscaban familiares y amigos entre el lodo. Mientras, Mazón y Sánchez junto a otros políticos con mando, no sabían qué hacer. Y, lo que es peor, tampoco querían. Solo horas después de que empezaran a mezclarse supervivientes y cadáveres en el fango, otros estaban aprobando cambios en la radio y televisión pública.

Mientras miles de personas llegaban andando por puentes y caminos, mientras miles de profesionales como militares y bomberos esperaban una orden, fue la sociedad civil la que dio la mayor y más fácil lección prestando la ayuda que podían con lo que tenían. La importancia de las primeras horas la tomaron con total inacción, para pasarse la responsabilidad de los muertos de un color al otro. Y pasó demasiado tiempo hasta que se movilizaron. Por supuesto, además hay daños materiales y una gran repercusión económica y laboral. Pero, insisto, son las vidas humanas las que no se podrán recuperar.

No quiero seguir fustigando lo que por desgracia ya no tiene arreglo. Pero esta clase política debería tener presente la historia de cada uno de los más de doscientos fallecidos. Simplemente con esos minutos, horas y días que pasaron aquellos a los que se pudo socorrer y, por incompetentes y miserables, no pudieron, debería servirles para cuestionarse por qué siguen en esos cargos. Sí, son cómplices. Que dimitan o sigan calentando un sillón no solucionará nada. Aunque tampoco retractará mis palabras. Si tienen una pizca de vergüenza, ya deberían haber cerrado al salir.

Y después de dos semanas, ya está la maquinaria de la desinformación a plena potencia. Los medios de comunicación terminan siendo despreciables en muchos casos. Alguno reportero manchándose de barro para parecer más trágico, alguna reportera tergiversando mensajes de lodo en la pared. Cuesta mucho creer lo que está pasando.

Solo me quedo con esos profesionales que siguen dejándose la piel y esa cantidad de gente solidaria que ha ayudado in situ o de cualquier manera. De verdad, esto sí es para elogiar. En muchos casos siendo o no su trabajo, utilizando sus horas libres, se ha podido comprobar solidaridad de la auténtica. Esto no va de colores, que no nos engañen más. Somos un gran país que hemos demostrado de nuevo una bondad brutal, pero un país dirigido por los peores y más corruptos e inútiles gobernantes que pudieran existir. Y esa es la triste realidad.

domingo, 14 de marzo de 2021

14-M, ESA FECHA

Política aparte. Cumplo 36 años, poco o mucho según se mire. Pero desde hace un año, la vida nos cambió a todos por completo. En lo laboral, en lo social, en el ocio, en el día a día. Mascarilla y gel hidroalcohólico, normas, restricciones y toques de queda. Cambiar y adaptarse como ley de la vida. Reprimirse, aplazar, suspender...

Hemos aprendido a vivir de otra manera, a sobrevivir con lo puesto. Hemos perdido familiares y conocidos por esta puta pandemia y nos deben hacer ver que la vida son esos momentos que vivimos intensamente, que vivimos de verdad. Es algo que siempre pienso, digo e intento hacer. casi mi lema diario.

Gracias a todas las personas que han dedicado unos instantes del día en felicitarme por los distintos medios de los que disponemos. Porque son justo las personas las que dan sentido a nuestra existencia y hacen que este mundo sea más bonito de lo que realmente es. Este año lo hemos celebrado como mejor hemos podido. Pasan los años y vamos creciendo (o envejeciendo), pero intentamos que la esencia se mantenga. ¡Mil gracias!

viernes, 5 de marzo de 2021

EL 8-M Y EL EXTREMISMO

La polémica está servida desde el pasado año. Pero no aprendemos, parece que se nos olvida la pandemia por momentos. Y aquí vienen las inútiles propuestas: por la izquierda, reuniones de 500 personas, porque a partir de 501 ya sería un problema; por la derecha, prohibir y no hacer nada. No hacer nada si se trata del 8M, si se trata de un mitin de Vox en el centro de Sevilla, adelante.

Blanco o negro. Madrid sí y Cataluña no. Esas son las opciones que dan los medios de 'manipulación' para que sigamos entretenidos y despistados a otras noticias como los 4 millones de parados y 900.000 personas en ERTEs, o a la desfachatez de la Monarquía y Juan Carlos I pagando a deshoras impuestos con 'limosnas amistosas',

Además de los más de 70.000 fallecidos oficiales, nos hemos olvidado de los miles de hosteleros y puestos de trabajo que no pueden realizar su labor en plenitud y que, en un buen porcentaje, cesarán su actividad para siempre. También de aquellas parejas que no han podido celebrar su boda como querían, familias que no se pueden reunir, viajes y vacaciones cancelados y un sinfín de situaciones más o menos trágicas y sobrecogedoras que se han tenido que dejar de hacer, al menos, como queríamos, para mostrar nuestro lado más responsable. Son datos espeluznantes, dignos de una película de terror.

¿Hay otras alternativas? Por supuesto. Desde manifestarse en coche con megáfonos y altavoces montando la cola más larga del mundo si fuera necesario a llenar balcones y fachadas de banderas con mensajes. La manifestación nunca se perdió con la pandemia, pero si que debió adaptarse.
Estamos en el año 2021 con teléfonos móviles e internet aunque, en ocasiones, nos empeñemos en volver a 1936. Son tantas las formas... Pero en la búsqueda de lo incómodo y lo imposible dejamos de lado la sensatez y la lógica. Y en este caso, nos dejamos la solidaridad.

Un servidor está tremendamente cansado de las dos Españas, de tener que ser de algún extremo, de la provocación incesante para la confrontación demagógica inútil. De que los políticos se apropien indebidamente de lemas, días y banderas y luchen entre ellos con todas sus fuerzas por cuestiones insignificante. Porque la cuestión principal no es salir a la calle y hacer ruido, la cuestión ese día es la MUJER. Otra política es posible, aunque cada día la veo menos probable.

miércoles, 24 de febrero de 2021

DEFENDER A UN DELINCUENTE

Nadie debería ir a la cárcel por sus ideas, absolutamente nadie. Otra cosa son los actos y declaraciones. Ejercer nuestra libertad de expresión no nos exime de responsabilidades, por tanto, utilicémosla bien. Y entendamos que en España hay unas leyes para bien y para mal, justas e injustas, mordazas, liberales... Pero son las que hay actualmente hasta que no se cambien. Y son muy necesarias para poder convivir con las mismas reglas en una sociedad cada vez más diversa.
Dicho esto, el rapero Pablo Hasél, con dos condenas firmes por enaltecimiento del terrorismo en dos etapas distintas, entra en la cárcel. Y aún tiene otras dos condenas por amenazas y agresiones...
¿Y salimos a la calle a pedir qué? ¿A defender qué? ¿A mostrar frustración por qué?

Y podrá llevar toda la razón que quiera este tipo, no se lo voy a discutir, aunque tampoco esté de acuerdo. Desear la muerte de otra persona es lo más rastrero en la personalidad de un ser humano, sumados a otros insultos y comentarios machistas denotan una persona con principios podridos.

Pero como decía al inicio, nos regimos por unas normas: ya te han condenado una vez y no has entrado en la cárcel por no superar los dos años y no tener antecedentes, es decir, te registe por el sistema judicial actual. Y seguramente te interesó, pero no aprendiste. Has intentado seguir al margen de la ley pero la jugada no te salió. Pues chico, la sociedad creo que ya ha hecho suficiente por ti.

Sin embargo, lo que la sociedad se lleva son altercados, destrozos, robos, violencia, heridos... Un precio demasiado elevado. Querer ser un mártir cuando eres un delincuente solo sirve para confundir a la gente. La libertad de expresión es un DERECHO y una RESPONSABILIDAD.

viernes, 4 de septiembre de 2020

SEREMOS UNOS EXPERTOS

Hace ya casi seis meses que se hizo insostenible no hacer nada frente al coronavirus. Hoy se pueden sacar muchas conclusiones, comentaré las que, en mi humilde opinión, considero reseñables:

- El coronavirus es real. Parece una tontería que lo tenga que decir pero aún hay necios que se apuntan al discurso negacionista bien porque están cansados de esta pandemia, bien porque hoy se han levantado de aquella manera.

- Manipulación y desinformación. Si antes los medios de comunicación parecían propagandísticos, ahora se han 'coronado'. Increíble que para buscar información fehaciente haya que rebuscar en internet. Ya canta mucho tergiversar hechos y decorar estadísticas según el color político de la cadena que veamos. Lo llamaban la 'Coronahisteria' y Al Rojo Vivo terminó borrando de internet sus programas del primer trimestre del año. Siempre recordaré el paso entre ser 'infectado' en China en Febrero a dar 'positivo' en España en Abril. Manipulación de masas lo llaman.

- Nos han mentido (I). Para mí lo más grave. Desde la OMS hasta Fernando Simón. Desde "España podría presentar uno o dos casos" hasta "la mascarilla no es necesaria". En ambos casos tenían información de sobra para dar indicaciones acertadas. Y quien nos indica cómo actuar en nuestro día a día para no contagiarnos, se contagia. Y luego nos tatuamos la jeta del experto epidemiólogo mentiroso.

- Nos han mentido (II). "Comité de expertos" para la desescalada que no existió, más de 15.000 muertos no reconocidos. Aún recuerdo ese día que 'resucitaron' a 2.000 personas. Y la primera semana de Marzo "teníamos un sistema sanitario totalmente preparado". Ni siquiera políticos de primera línea han mantenido las medidas de seguridad y han sido infectados.

Idiotez autonómica. Gobierno central mal y autonómico peor. Es una soberana estupidez reducir, por ejemplo, de 10 a 6 personas las reuniones en una Comunidad y en otra limítrofe no, con libre circulación entre ellas. Recomendaciones inútiles y prohibiciones sancionadoras para poder recalar toda la culpa y responsabilidad en el ciudadano. En un mismo país, con diferentes sistemas sanitarios, normas, prohibiciones, multas para un mismo problema... En vez de enfocarla solución de España para Europa (o el mundo), lo enfocamos de la Comunidad Autonómica para dentro.

- Desunión política. Que no quieran ponerse de acuerdo nunca, hasta lo podría aceptar. Con una crisis sanitaria que nos afecta absolutamente a todos, es inaceptable. Desde los congresos y cámaras hasta ayuntamientos. Utilizar un problema para crear una oportunidad dejando a los enfermos y fallecidos en segundo plano.

- Sociedad ejemplar. Y matizo. Que cuatro energúmenos, o diez, o incluso cientos, no cumplan las normas de seguridad y distanciamiento y sigan rebrotando el virus, no quita que los millones de personas y, en especial, los trabajadores que se han dejado la piel mientras la situación ya era insostenible tengan su merecido reconocimiento. La población que ha mostrado responsabilidad, coraje y solidaridad supera en porcentaje al manifestado por el congreso de los diputados, por poner un ejemplo.

Y termino: Es más fácil analizar 'a posteriori' (término simple que algunos utilizan para defender lo indefendible) que hacer una previsión de un suceso poco o nada común. Es muy difícil atajar esta situación desde todos los ámbitos. Cualquier decisión crea controversia y el tiempo no juega a favor. No soy un experto en la materia, ni lo seré. Y agradezco enormemente a todos los que han ayudado tanto en su puesto laboral como de forma altruista. Incluso ayuntamientos, que no todos están en el mismo saco. Nadie debería negar que no está siendo nada fácil.
Sin embargo, medio año después seguimos sin hacer tests masivos, ni examinar viajeros en los aeropuertos, ni controlar todo lo que entra en un país con normas desiguales, que hasta los centros médicos de localidades colindantes atajan los posibles positivos de formas distintas.

Pero ojo, la culpa al final es mía y tuya.

lunes, 20 de abril de 2020

SIN LÓGICA

Pasados más de treinta días desde que se proclamara el estado de alarma y dado que es una situación extraordinaria y difícil, sigo sin entender muchos puntos de la gestión y la antigestión de la crisis causada por el COVID-19.

No entiendo cómo desde el primer día se permitió poder pasear al perro y no se tomó ninguna medida para que los niños, que llevan más de un mes en casa, pudieran salir a la calle acompañados por un adulto, con todas las medidas de protección que debemos llevar.
Y empiezo por aquí, porque cuando vuelvo de pasear a mi mascota, tengo que extremar las precauciones limpiando y desinfectando todo lo que hayamos podido tocar o pisar. ¿Por qué el perro sí y un niño no?

Al igual que no entiendo por qué no se puede hacer deporte en solitario. Correr o montar en bicicleta sin aparecer por núcleos urbanos no debe constituir ningún riesgo.

No creo que tenga que estar confinada una familia en una población de dos mil habitantes, cuando no se extreman las precauciones al máximo en las ciudades.

No veo bien, por ejemplo, que los supermercados hubieran encogido sus horarios, acortando la hora de cierre hasta las 19:00h. cuando, en mi opinión, deberían haberles permitido ampliarlo.
Justo ahora que la hostelería está cerrada y aumenta notablemente la demanda. Justo ahora que los establecimientos deben limitar el aforo. Es decir, concentramos más gente en menos tiempo. De locos.

Tampoco veo bien que hayan restricciones de familiares en los más de veinte mil entierros que se han sucedido y que en los platós de televisión se sigan haciendo algunos programas sin respetar esas restricciones. Esto sí es de sinvergüenzas.
Seguramente sea porque ya en las ruedas de prensa diarias del gobierno no cumplen con esa distancia mínima. Y quienes salen a la palestra a dar información, consejos e instrucciones, han dado positivo. Creía que se predicaba con el ejemplo.

Pero lo que más rabia me da es la falta de unión de políticos en una pandemia que nos afecta a todos y que no debemos buscar la culpa. 
La ciudadanía le está dando una lección de compromiso, obediencia y solidaridad que veo que nunca tendrán.

Son solo algunas cuestiones. Quizás esté equivocado. Siempre será una opinión más.

martes, 21 de enero de 2020

PIN PARENTAL, ¿LIBERTAD O CENSURA?

Pues según si eres del Madrid o del Barça.
Ah, perdón, que esto no es fútbol, ¿tengo ya tu atención? Pues eso es lo que están consiguiendo de un lado y otro.

¿Es perjudicial para los niños una charla sobre la sexualidad, la filosofía, las religiones, la violencia de género? NO.
¿Es perjudicial para los niños que sus padres puedan tener libertad para censurar o censurar la libertad que enseñan estas charlas complementarias a las materias básicas? TAMPOCO.

Que los niños sepan más de todo, siempre será beneficioso. Que los padres puedan decidir si esas charlas las reciben en el colegio o se las dan ellos mismos, cuándo y cómo, es, como poco, justo.

Que nos entendamos: El gobierno con sus políticos, organizaciones y demás mandatarios nos da a entender que los contenidos que recibirán nuestros hijos serán adecuados. Bien. Me parece muy bien. ¿Y cuáles son esos contenidos? ¿Los mismos que en Cataluña? No me fío de quienes necesitaron dos elecciones en el mismo año para ponerse de acuerdo qué sillones repartirse.

La ministra de educación confirma que los hijos no pertenecen a los padres, que gramaticalmente lleva razón. Ojo, no son posesión como tal de nadie. Pero sí les pertenecen su patria potestad por lo que deben velar por su educación, formación, alimentación y cuidado.

Pero vamos para la otra parte. Resulta que empiezan a salir charlas de 'adoctrinamiento' con educación sexual avanzada (casi porno) a niños pequeños o, incluso, hasta drags queen enseñando la perversión en su plenitud. Todo son bulos. Pero lo peor, es que son bulos innecesarios. Y da que pensar.

¿Realmente hace falta la imposición de un pin parental? Pues no. Porque en los colegios ya se avisa de ese tipo de charlas a los padres antes de que sucedan.
Y es más, en España, si eres evangelista, católico, musulmán o cerrado de mollera, tienes diferentes colegios a los que acudir, dado que si no son colegios públicos, no todos los demás son privados de alta gama, también los hay concertados.
Si nuestro estado es laico según la Constitución, ¿por qué aún existe la religión como asignatura aunque no puntúe? ¿Y no será mejor que los padres o el propio niño cuando tenga la edad necesaria decida?

Y les digo yo a los políticos:
- Para los murcianos, ¿No estaréis utilizando todo esto para tapar de nuevo el #SOSMarMenor que parece que se os olvida? ¿Y no estaréis usando el pin parental para tapar los continuos casos de corrupción que no les veo aún la condena?
- Para el gobierno central, ¿No estaréis utilizando todo esto para tapar la elección como Fiscal General de una anterior miembro de vuestro partido? ¿Y no tendrá que ver esta elección con vuestros pactos con otros partidos?

El conocimiento os hará libres. La verdad os hará libres. Dejemos que los niños, sean niños. No hagamos que Sócrates y Jesucristo pierdan la razón. El desvío de atención por parte de políticos parlanchines y demagogos es demencial. Sigamos sin caer en este juego que nos divide y no nos une, por favor.

miércoles, 11 de diciembre de 2019

HAZ LO QUE YO DIGA PERO NO LO QUE YO HAGA



¿Hasta cuándo nos dura la resaca de las elecciones? Es increíble la capacidad que tiene el ser humano para indicar lo que NO deben hacer los demás. Para eso, nos sobramos y nos bastamos.

Después de ver, escuchar y, sobretodo, leer, he entendido que la democracia no es el mejor sistema político para nosotros. Probablemente el más justo. Aunque este tema lo dejaremos para otro día.

Nuestro país es experto en etiquetar:
- Si votas a Vox eres un fascista, racista, etc.
- Si votas a Unidas Podemos, eres un comunista, rojo, etc.
- Si votas a…

¿No vivimos en una democracia? ¿No tenemos el derecho (que no el deber, ojo) a votar a quien nos plazca? ¿No hay una ley electoral que exige unos requisitos para que un partido sea legal? Hablemos de esos requisitos…

Me parece mucho más grave que existan partidos políticos con miembros en sus filas que han sido condenados por terrorismo o corrupción. ¡Coño, que nos han estado robando! Ladrón de guante blanco lo llamaban. Y ahora nos preocupamos por el inmigrante que nos va a quitar el trabajo. ¿Qué trabajo? ¿De verdad?

Detesto en el absurdo que se ha convertido hoy hablar de política. Un teatro cínico de intereses desproporcionados donde las personas actúan de manos extensoras de barata propaganda electoral, reenviando noticias o fake news sin importarles la fuente o su veracidad, da igual, porque solo interesa lo que el otro ha hecho mal o lo mal que lo pasaremos.

A toda esa gente, un mensaje muy simple: “Construir siempre es mejor que destruir”.


jueves, 25 de julio de 2019

VERGÜENZA


Es lamentable deplorable, indigno, bochornoso, ruin... cualquier calificativo vale.

Hablemos claro: llevan meses, incluso años, identificando una situación social y económica como terrible. Ahora tienen oportunidad de 'cambiar', pero se cierran en banda y no son capaces de llegar a ningún acuerdo, ni siquiera con aquellos que debieran ser sus 'socios' por ideología.

¿Y esperan que me crea que su prioridad es el país y sus habitantes? ¡Venga ya!

Y sigo hablando claro: si estuvieran sin cobrar mientras no formen gobierno...

Si tuvieran que costear de sus bolsillos los más de cincuenta millones de euros que cuestan unas nuevas elecciones que seguirán diciendo lo mismo...

Si, por no realizar su trabajo correctamente, fueran despedidos como en cualquier trabajo...

Si no pudieran presentarse a las siguientes elecciones por ineptos y tuvieran que ser relevados...

Si de verdad tuvieran en mente a aquellas personas que deben esperar un cambio de políticas, desde lo social a lo económico, para tener un desahogo real en el día a día...

Pues creo que con solo una de estas razones, hoy ya tendríamos gobierno. El país lo mantienen sus habitantes. Estos políticos solo resaltan el chiringuito de sinvergüenzas que mantenemos. Y todo esto quedará en un circo ya que 'aún' pueden evitar elecciones.

jueves, 20 de junio de 2019

ASESINOS POR UN CIGARRILLO

"¿Me das un cigarrillo? - No." Fin de la vida.

Y treinta y tres años a la mierda. Una familia destrozada. Un futuro reventado. Un grupo de amigos desolados (que leo que perdieron otro recientemente por un atropello). Y una vida menos.

Esto ha ocurrido en Oviedo la pasada semana, al término de unas fiestas de un barrio. No deja de ser triste, pero lo veo muy preocupante. Porque al margen de si fue exactamente así o no, que habrá alguna variación porque hay una parte que nunca podrá defenderse ni explicar lo sucedido, estamos hablando de que tres monstruos que apenas son mayores de edad le propinaron una severa paliza que terminó en la muerte de una persona días después en el hospital.

Todos los chavales de hoy en día no son así, ni mucho menos. Sin embargo, hay un porcentaje preocupante de individuos que acosan y hostigan a gente porque sí. Joder, que falta más empatía y más conversación y sobra esa soberbia y despotismo gratuito. Soy consciente de que es difícil educar en la actualidad pero creo que estamos fallando en las formas. Además, nos hemos dejado el mínimo de moral e intelecto por el camino. También el respeto a la vida y la educación para/con otras seres.

¿Debemos tener miedo? No, ni mucho menos. Pero quien no debe tener miedo es el/la juez/a que lleve el caso. Ni que le tiemble la mano al delimitar el castigo que merecen. Ni quiero pensar en las rebajas de pena o en la reinserción en la sociedad de estos sujetos, sería muy injusto. Porque hay una persona menos y tres monstruos más. Hay algo que estamos haciendo mal.

viernes, 31 de mayo de 2019

UN FUTURO MAL APOSTADO

Leyendo otro caso más de corrupción en el deporte, el de la operación 'Oikos', donde presuntamente hay varios partidos amañados y algunos futbolistas e, incluso, un presidente imputados, no me sale otra reacción que el cabreo y el cansancio. Pero con el trasfondo del asunto, me explico:

Mi cabreo viene porque se ha permitido una tendencia peligrosa, sobretodo para jóvenes, pero también para cabezas de familia, donde no hay límite ninguno, excepto el dinero propio (o ajeno).  Hace unos meses, un portero de uno de estos lugares me contaba como un hombre de mediana edad perdía en una noche todo el sueldo del mes (950 €) que acababa de cobrar ese mismo día. La enfermedad se llama ludopatía. Y esto, es muy triste. Que además, hayan personas que se lucren con este tipo de casos, mucho más triste aún. Pero que nuestros gobiernos lo permitan porque, entre otras cosas, cobran los impuestos y 'está todo en regla', indignante.

Y se puede jugar y apostar muy fácilmente: en el móvil, en el salón de juego, con apuestas deportivas, de carreras de galgos, con ruletas rusas, con máquinas tragaperras... Tenemos un pequeño 'Las Vegas' por cada calle que andamos.

Lo que me cansa es ver como nos pasamos la pelota de un lado a otro, de un ayuntamiento al gobierno de la Comunidad y de ahí al gobierno central, sin solucionar absolutamente nada. Las casas de apuestas han masificado pueblos y ciudades (solo en las Torres hay ocho). El tabaco, el alcohol y el juego han sido, históricamente, los vicios más lucrativos. Hemos sustituido cafeterías y bares por salones de juego. Y el juego en exceso, como todo en la vida, puede ser fatal.

Hay soluciones y deben ponerse límites antes de que sea tarde. Con el carnet por puntos y el aumento de controles se consiguió reducir el número de accidentes provocados por el consumo de alcohol, y se consiguió, sobretodo, concienciación. Logremos entre todos la fórmula que reduzca este vicio porque el 'juega con responsabilidad' es meramente una pantomima. 

jueves, 23 de mayo de 2019

REDES SOCIALES: LA NUEVA INQUISICIÓN


Desde los comienzos de internet, donde los chats y foros nos conectaban virtualmente, hemos asistido a una brusca y violenta transición del eterno juicio social sobre lo que dejamos o no dejamos de hacer.

La interacción actual entre personas y el alcance a la información (o a las informaciones que nos interesan), son asombrosas respecto a hace, pongámosle, unos veinte años. Pero claro, las herramientas que hoy en día tenemos en la mano pueden usarse de mil maneras. Y siempre gustó la crítica, la detracción, la difamación y las calumnias pero, sobretodo, opinar lo que está bien y lo que está mal.

Por ello, cualquier individuo que se salga de la línea de lo 'correcto' socialmente, nos lo cargamos: un simple tatuaje, una fotografía, una frase con algún equívoco, un corte de pelo, una copa en la mano, una camiseta, un vestido, un escote, un comentario, una publicación en Instagram, un tweet, un titular impreciso... Cualquier gesto o acción de nuestro día a día.

¿Y qué pasa? Que se nos olvidan los límites. Y el respeto, el decoro, el tacto. No pasamos el filtro del razonamiento (mucho menos el del intelecto) y soltamos lo primero que se nos pasa por la cabeza. Y conseguimos hacer daño, a veces mucho, a personas que, incluso, ni saben que están hablando de ellas. Pasa en Facebook, pasa en Twitter, pasa en Instagram...

Y conseguimos enfrentamientos absurdos y discusiones odiosas, móvil en mano, por algo viral pero insignificante. Lo bonito que sería dejar hacer, dejar vivir, respetarse y aprender en vez de ajusticiar a un famoso o a un desconocido en una red social.
La libertad de expresión es un derecho. El respeto, un deber. Hagámonos valedores de ambos.

martes, 21 de mayo de 2019

¿BATALLA LOCAL O ELECCIONES?


Estos últimos días observo como se nos va de las manos la campaña electoral de mi pueblo. Además del escueto (por no decir la falta de) respeto entre partidos políticos, he comprobado como la gente de la calle sigue defendiendo con uñas y dientes a 'su' partido, pase lo que pase.

En el arte de la guerra se decía que "la mejor defensa es una buen ataque". Y eso es lo que está ocurriendo. Veo 'habitantes' que cuestionan a los aspirantes por no estar empadronados, o por no estar trabajando en el municipio. Sigo la vista atrás y aparece alguna denuncia por saltarse normas de la Junta Electoral en plena campaña.

Que no digo que falte o no razón, ni siquiera que sea o no legal pero, ¿somos poco más de 21.000 habitantes y ésto es lo que nos interesa? ¿Qué envergadura acapara el interés de unos pocos? Me preocupa palpar más el anhelo de poder antes que el bien común.

Sé que es difícil, pero me gustaría ver de una puñetera vez que la política que practican los Sánchez, Rivera, Iglesias... no tiene nada que ver con la política local. Que si nos parece bien e interesante la propuesta del rival, se dice, se apoya y punto. Para batallas dialécticas y de oratoria ya tenemos 350 diputados, 266 senadores y un sinfín de políticos, periodistas y programas de televisión. Para gestionar un pueblo estoy seguro de que se hará mucho mejor si partimos de la unión de todos aquellos que han sido elegidos por sus vecinos, sean del color que sean.

miércoles, 3 de abril de 2019

POLÍTICAMENTE INCORRECTOS


En estas semanas 'previas' a las distintas campañas electorales, donde las noticias o el intento de ellas se retozan airadamente para intentar confundir y revolver el pensamiento y hasta la conciencia de los votantes, tengo que decir, una vez más, que la política, cada día, da más asco.

Ya sé que no digo nada nuevo. Pero parece que no había bastante con las mentiras, calumnias y falsas promesas a las que nos tenían acostumbrados. Ahora, cualquier simpatizante, bien por las redes sociales, bien en el bar, es capaz de creerse cualquier argumento que le pongan. Y lejos de comérselo con patatas; lo comparte, lo debate, lo discute, lo defiende y lucha por él si es necesario.

Porque en este país tener la razón tiene más valor que conocer la verdad. He llegado a presenciar discusiones por Venezuela e Irán como si la visitáramos todos los veranos; y enfrentamientos de seguidores de Vox vs Podemos como si estuviéramos en plena Guerra Civil, o, incluso, que me digan que "el feminismo 'solo' lleva unos años".

En serio, ¿por qué nos creemos lo primero que nos dicen? ¿qué miedo tenemos a escuchar algo que no esperamos? En ocasiones creo que nuestra capacidad para filtrar una noticia nos la ha impuesto el partido político al que seguimos, como si fueran papá o mamá, creyéndonos que todo lo que hacen estará bien hecho.

¡No! No caigamos en la misma trampa. Esto no se trata de ser seguidor de un equipo de fútbol para lo bueno y para lo malo. Pueden gustarnos propuestas de todos los colores políticos. Sí, de todos. Puede haber diversidad de ideas, de opiniones, de gustos. Al menos, seamos libres de pensamiento.

viernes, 8 de marzo de 2019

FEMINISMO O IGUALDAD, QUEDÉMONOS CON EL CONCEPTO


Nos hemos llevado un día dedicado a ellas por parte de todos desde hace muchas décadas al terreno áspero de la política. En mi opinión es un enorme error y tiene una explicación sencilla: el movimiento feminista es independiente de todo lo relacionado con la política. En el momento que se encasilla con un partido, termina perdiendo adeptos.

Este día tiene ciertos matices de los que me gustaría quedarme con dos: recordar que años atrás las mujeres eran oprimidas por el hombre y que queda un largo camino por la igualdad donde todos tenemos que actuar ya. Y es que existe igualdad legal, pero no termina de ser real, ese es el problema.

Cada día que pasa, suelo leer y escuchar más lo de "si no eres feminista, eres machista". Siempre he odiado que me encasillen, mucho más cuando ni siquiera me he pronunciado. Así que llamadme como mejor guste, pero mis ideas son claras y concisas:
- Odio la violencia de género en su totalidad. Odio aún más cuando el hombre le pone una mano encima una mujer por el mero hecho de ser hombre.
- Odio la violación. Y odio aún más que no se castigue a los violadores como si fueran asesinos, porque lo único que no quitan es la vida física.
- Odio la leyes de violencia de género actuales cuando no solucionan nada. Odio que las condenas de los asesinos y violadores sean de risa.
- Odio las diferencias salariales y de oportunidades laborales. En el trabajo (como en la vida) siempre veo personas, no hombres y mujeres.
- Los hombres y las mujeres NO somos iguales, igual que un niño no es lo mismo que un anciano, es una evidencia clara. Otra cosa son sus derechos y oportunidades, que deben ser exactamente los mismos.
- Nuestra lengua castellana tiene pinceladas machistas. Pero la lengua cambia con el paso de los años. y hay que trabajar en ello. Eso sí, para mí no es prioritario algo que no se puede cambiar de la noche a la mañana cuando tenemos que arreglar todo lo anterior de manera urgente.

Y mucho más. Resumo a grandes rasgos lo que pienso. ¿A favor del feminismo? Sí, por supuesto.
Nunca de la radicalización, nunca del enfrentamiento, nunca del aprovechamiento político-partidista.